jueves, 20 de noviembre de 2008

Mucho ruido


El joven William decidió tomarse un descanso. No había parado en toda la mañana, necesitaba aislarse un rato, anotar los nuevos detalles que había descubierto de sus compañeros de oficina.

Cumplir con su burocrático trabajo, sin descuidar su vocación de detective-poeta, comenzaba a estresarlo un poco.