domingo, 7 de diciembre de 2008

Staying alive


Se conocieron en la pista de baile. Él bailaba como ninguno. Ella se hacía la indiferente pero no podía dejar de mirarlo. Todos le decían a ella que era la más linda y coqueta del grupo. Él decidió un día sacarla a bailar. Ella le dijo que no (prefería contemplarlo desde cierta distancia para no perderse ninguno de sus pasos). Al siguiente intento, ella accedió y nunca más pudieron separarse. Eran los dueños de la pista, la envidia de todos y todas. Una pareja perfecta.

Actualmente se los puede ver en bodas familiares y fiestas de empresa. Las caras cambiaran, pero en el fondo, siguen siendo ellos dos.